Este nuevo sistema de legalización de documentos extranjeros, afecta exclusivamente a aquellos que procedan de países no miembros del Convenio de La Haya sobre la Apostilla y quieran hacerse valer en España.
El sistema consiste en que, una vez el documento extranjero ha sido legalizado en una oficina consular española por un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, se estampará directamente sobre la firma de este funcionario, una pegatina trasparente de seguridad. Esta pegatina protege la última firma de la cadena de legalización salvaguardándola de posibles fraudes documentales al incorporar las tecnologías más avanzadas contra falsificaciones.
Así, gracias a esta pegatina transparente ya no será necesario que el documento extranjero legalizado en la oficina consular tenga que pasar por la sección de legalizaciones en España, siendo este documento plenamente válido a los efectos del ordenamiento jurídico español desde el mismo momento en que el Cónsul de España en el país de origen del documento haya estampado sobre su firma la pegatina de seguridad.
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